LA VIDA EN MORDOR

|
Euforia retronostálgica es lo primero que nos encontramos al llegar al piso la última noche. Qué pelopúntico, qué analógico, qué de fantasía pop. Mientras tanto, que continúe la revolución. Cargados de energía nos hallamos: podríamos comprar un saco de boxeo para desahogarnos mientras escuchamos el mejor rock duro, o irnos de fiesta por los museos, como hacía el Joker. Yo qué sé, cualquier cosa.

No hay comentarios: